Si selecciono de internet 1000 fotografías al azar, estoy casi convencido de que las que van a llamar mi atención son aquellas donde se ha aplicado un buen procesado fotográfico posterior.
Puede que existan determinadas excepciones, pero conociéndome es muy probable que no sea así.
Pero entonces ¿Solo se consiguen llamativos resultados con Photoshop (u otros)?
Para nada. Es más, ser creativos en el momento de la toma es imprescindible para conseguir esa impactante imagen final. Y para ello, debemos de ir un paso más allá y hacer algo inesperado, innovador y que no solo sea apuntar y disparar.
Veámoslo con el siguiente ejemplo:

La fotografía anterior es una imagen compuesta de 4 fotografías diferentes. Entiendo que esto al principio pueda abrumar, pero estamos ahora mismo frente a un ejercicio de creatividad.
Veamos por qué.
Es probable que al llegar a esta ubicación, colocar la cámara y el trípode, tu primera idea sea realizar una larga exposición o jugar con diferentes tiempos que te permitan conseguir distintos resultados. Pero, ¿Debes conformarte con una sola toma?
¿Qué pasa con el atardecer?
¿Qué pasa con ese preciso instante cuando las olas rompen contra la roca?
¿Por qué no puedes llevar tus imágenes a cotas superiores si tu corazón así te lo pide?
Estos instantes pueden ser igualmente capturados y mostrados en la imagen final que quieres conseguir. La parte negativa es que no se puede conseguir con solo una captura.
Veamos las que han sido necesarias para conseguir el resultado final:

Esta toma ha sido utilizada para conseguir el primer plano y ese movimiento concreto del agua. Fue realizada con un tiempo de exposición de medio segundo y en el preciso instante cuando la ola superaba la posición de mi trípode.

La anterior toma fue capturada en el momento exacto cuando una ola rompía contra la roca de la derecha. Se utilizó un disparo en ráfaga para tener varias opciones de donde elegir.

Finalmente, esta tercera foto también fue realizada en el momento exacto en el que una ola rompía contra la roca de la izquierda.
En resumidas cuentas, podemos observar como son 3 ideas distintas que a su vez necesitaban de 3 fotografías en momentos independientes, para poder ser capturadas adecuadamente.
¿Ahora solo nos queda fusionar y procesar con Photoshop?
En cierta forma, sí. Pero nada de esto sería posible si durante el momento de la toma no hubiéramos capturado correctamente las fotos necesarias.
Es precisamente en ese lugar y mientras haces las fotos, cuando más creativo debes de ser e intentar ir un paso más allá del apuntar y disparar.
Evaluar la escena, pensar y decidir como puedes hacer de esa foto algo diferente.
Porque la creatividad, no nos engañemos, solo la mejoraremos practicando. No puedes resignarte a decir que no tienes creatividad o talento, mientras estás tirado en el sofá.
Sal a hacer fotos. Practica constantemente. Se atrevido con tu cámara.
Te aseguro que los resultados llegarán. Sí o sí.
Y, en tu caso, ¿cómo lo hubieras hecho?:
- ¿Habrías realizado también más de una toma?
- ¿Prefieres hacer imágenes que estén formadas por una sola captura?
- ¿Crees que hubiera sido interesante capturar otro momento
Estaré encantado de leer tus respuestas en los comentarios.